Cuatro esquinitas tiene mi cama, de Fernando Méndez

Tampoco me había dado cuenta de que el mismo Armand estaba de pie detrás de mis amigas contemplando la escena con una sonrisa de pillo que no se pué aguantá.

Editorial: Sumadeletras

Fecha de publicación: 02/2014 
 
Páginas: 400
 
Precio: 17€ edición en papel / 7,99€ edición ebook

 

ISBN: 9788483656280

SINOPSIS

Lourdes es una florista gallega que un día recibe la visita inesperada de su ángel guardián. La situación es crítica: tiene apenas un par de días para reparar el daño que hizo a los espíritus que llevan acompañándola desde hace miles de años, o perderá el amor de su hija. En el camino descubrirá que ella fue Cleopatra y que debe remediar el daño que hizo entonces.

AUTOR

Fernando Méndez es un periodista y escritor español nacido en Buenos Aires. En el periodismo ha recibido premios tales como el Reina Sofía de Periodismo y el Xunta de Galicia sobre Drogodependencias. Ha trabajado en diversos diarios e instituciones de Galicia. En el mundo literario debuta con Cuatro esquinitas tiene mi cama.

TRAS LA LECTURA

Siempre digo que los libros de humor me cuestan, y es cierto. Recelo bastante de ellos, pues no me terminan de convencer y muchas veces encuentro los giros o las gracias que hacen como algo demasiado forzado. Sin embargo, he tenido alguna sorpresa, como la de Maldito karma, por lo que termino volviendo al género de tanto en tanto.

En esta ocasión he de decir que, también como me suele pasar con estos libros, Cuatro esquinitas tiene mi cama ha tenido sus altibajos. Llegué a él por una reseña que prometía bastantes risas y al empezarlo, aluciné. Realmente cada uno de los primeros capítulos está lleno de gags inesperados que me hacían soltar una carcajada. La cosa prometía mucho... Y llegamos al "pero". Realmente era muy difícil mantener el nivel. Los siguientes capítulos decaen y, sin llegar a ser aburridos, ya pasan a sacar sonrisas más que carcajadas.

Claro que este decaimiento va también en favor de una trama que tiene que desarrollarse. Una historia muy curiosa, que nos lleva de viaje por el tiempo para que la protagonista, Lourdes, cumpla su misión. A medida que los acontecimientos se van sucediendo, vamos viendo que todo está hilado y nada es casual. Es una trama ligera para el lector, pero trabajada por parte del escritor.

En cuanto a los personajes, Lourdes, haciendo de narradora en primera persona, es la que sostiene el tono de comedia y de humor a lo largo de todo el libro. Su forma de ser, irónica, pero humilde y sincera, impregna cada página. Es sin duda un gran personaje y, quizás el más palpable. El resto, o bien salen demasiado poco o, en el caso de Armand, el ángel que ayuda a Lourdes, peca de soso y de parco en sus explicaciones, sin llegar a calar demasiado. Sólo al final endereza y se hace más fácil empatizar con él.

Al ser Lourdes la narradora, el estilo es muy llano y sencillo. Realmente es como si todo lo expresara cualquiera de nosotros, con nuestras mismas palabras y coletillas, con nuestros pensamientos.

Es, en definitiva, un libro divertido pero que empieza con mucho humor y se va suavizando para quedar en un tono de comedia ligero, en el que las buenas intenciones y los buenos sentimientos van guiando la acción hasta un final de sonrisa que, ciertamente, funciona y deja con un buen sabor de boca, además de transmitir su moraleja.

¿Recomendable? Me ha entretenido y divertido. Es una lectura ligera que no tiene que envidiar nada a alguna de David Safier. Muy recomendable.